La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha realizado unas declaraciones en Telemadrid en las que deja claro que no está dispuesta a tolerar “tonterías” de los de siempre. Cifuentes, se refería al movimiento 15 M. Declaró en la entrevista “que a ella, no le hubieran montado una sentada de dos meses en Sol, ni habría permitido los actos laicos de agosto pasado”.
Sigue soltando perlas a lo largo de la entrevista y dice: "No sé si hubiera ordenado una intervención policial pero lo que sí que sé es que probablemente no hubiera permitido un asentamiento de dos meses en pleno Madrid, en plena Puerta del Sol, con el perjuicio que eso ha causado a los comerciantes, a muchos de los cuales han arruinado (¿?) y con el perjuicio que ha provocado a todo el vecindario y a la ciudadanía"
También se ha referido a la resolución judicial de la Junta Electoral Central "que prohibía esa concentración en una jornada de reflexión". "Las resoluciones judiciales están para cumplirlas por parte de todos los ciudadanos, aquí no hay ciudadanos de primera y de segunda o ciudadanos que se puedan saltar las resoluciones judiciales y otros que no", ha dicho.
Después de leer las declaraciones de la delegada, a mi parecer se contradice. Por una parte no habría permitido “los actos laicos de agosto pasado” (no dice si ella sola o con ayuda de la policía) y por otra, dice que no hay ciudadanos de primera y de segunda. Si según Cifuentes, no hay ciudadanos/as de primera y de segunda, ¿Por qué no permitiría los actos laicos de agosto y si los del JMJ? ¿Son más ciudadanos/as los/as participantes en la Jornada Mundial de la Juventud que los/as que participaron en la marcha laica? No lo entiendo, para mi es una contradicción.
Cifuentes, asegura que el derecho a manifestarse "hay que protegerlo" pero también hay que "preservar el orden público". Con esto ¿qué quiere decir? ¿Insinúa qué una manifestación laica altera el orden público y las JMJ no?
A modo de conclusión, decir que en mi opinión la delegada del Gobierno en Madrid ha hecho unas declaraciones desafortunadas, en las que deja constancia de su menosprecio al movimiento 15-M y por los movimientos laicos. A mi parecer, aunque Cifuentes afirme que no, con estas declaraciones confirma que (para ella) si existen ciudadanos/as de primera (los de las JMJ con derecho a manifestarse) y de segunda (los “indignados/as” y “laicos/as” a los que no les permitiría expresarse).
Amparo Barroso Campos
Sí existen, sí.
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