miércoles, 30 de noviembre de 2011

Rajoy se reúne con los sindicatos y la patronal por separado.

El presidente electo del Gobierno, Mariano Rajoy, se reúne hoy, en la sede de su partido, y por separado, con el máximo responsable de la organización patronal CEOE, Joan Rosell, y con los secretarios generales de Comisiones Obreras (CCOO), Ignacio Fernández Toxo, y de la Unión General de Trabajadores (UGT), Cándido Méndez.


 
Y mi pregunta es: ¿De qué van a hablar? Según la mayoría de periódicos, Mariano Rajoy les va a pedir a los agentes sociales que cierren acuerdos tras las fiestas de Navidad. ¿Acuerdos? ¿Para qué? La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, declaró el lunes que si empresarios y sindicatos no llegaban a un acuerdo sobre la reforma laboral "de forma urgente" el Gobierno "gobernará", esto traducido al lenguaje de un/a niño/a de tres años sería: ¡En mi casa se juega así!

Aclarado el tema de las reuniones, la famosa reforma laboral, ahora me pregunto: ¿En qué va a consistir? ¿Qué medidas van a tomar? O mejor dicho: ¿Qué medidas proponen? Tras leer varios artículos de varios periódicos he llegado a la conclusión de que los sindicatos proponen más bien poco. Lo que parece, es que están dispuestos a renunciar a ciertos derechos. Esto es lo que decía Toxo al salir de la reunión con Rajoy esta mañana: es necesario "revitalizar el pacto social constituyente" y sacar adelante en Europa "un nuevo contrato social para salir de esta crisis, con las bases del modelo social y el derecho laboral, no diré intactas, pero que nos permitan abordar una siguiente fase de construcción europeo por una senda de mayor homogeneización en lo político, económico y social".

Por otra parte esta la patronal, que si tiene claro que va a proponer. El señor Joan Rosell cree que la próxima reforma laboral (dándola por hecha) tiene tres grandes claves: las modalidades de contratación, la flexibilidad interna y las indemnizaciones por despido. Sobre esta última “clave” Rosell propone equipararlas a las europeas, ya que dice que en España las indemnizaciones son muy altas. Y mi pregunta es: ¿Por qué no se equiparan los sueldos españoles a los sueldos europeos?



Por último quedan las propuestas del presidente electo, que muy claras no son, la verdad. Como no propone nada claramente, nos remitimos a las enmiendas que presentó el PP a la anterior reforma laboral. De todas la que más me ha llamado la atención es la propuesta de un fondo de capitalización individualizado para cada trabajador/a (siguiendo el modelo austríaco). ¿En qué consiste este “fondo de capitalización”? Consiste en la creación de un fondo (una especie de hucha o colchón) para cada trabajador/a que se llena con las aportaciones de las empresas en las que ha trabajado. Si el/la trabajador/a cambia de empleo, el fondo acumulado no se perderá. En caso de que el/la trabajador/a sea despedido antes, la cantidad acumulada hasta ese momento en su hucha serviría para compensar su despido (te pagas tu propio despido).

Por el contrario, si al final de su vida laboral este fondo es positivo, el dinero acumulado serviría para completar su pensión.

A priori esta propuesta parece razonable, pero, durante cuánto tiempo se podría cobrar dicho fondo, cómo se distribuiría y qué sucede cuando este se haya acabado y el/la trabajador/a siga sin encontrar un empleo.

Para concluir, decir que gracias a la poca fuerza que tienen los sindicatos, al poder que ostenta hoy por hoy la patronal y a las intenciones del nuevo gobierno, la nueva reforma laboral lo que seguramente conseguirá, será reducir los derechos de las/os trabajadoras/es.



Amparo Barroso.

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